La globalización, la transformación digital, el cambio climático, las nuevas dinámicas geopolíticas y los cambios socioculturales están configurando un nuevo orden mundial en el que la Economía, la Empresa y el Derecho enfrentan desafíos sin precedentes en las últimas décadas. En este contexto emergen nuevos paradigmas que cuestionan las estructuras tradicionales y exigen respuestas innovadoras y sostenibles. Este nuevo entorno global exige no solo adaptaciones técnicas, sino una profunda revisión de los fundamentos sobre los que se construyen las decisiones económicas, empresariales y jurídicas. Así, tanto las universidades como los centros de investigación, gobiernos, instituciones, empresas y organismos internacionales han intensificado los estudios y propuestas en busca de respuestas eficaces y acciones transformadoras que permitan enfrentar los nuevos desafíos del siglo XXI.